La habilidad de Eduardo Guerrero para reinventar Primus
La habilidad de Eduardo Guerrero para reinventar Primus
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Eduardo Guerrero, popular por su papel como coordinador económico en la campaña de José Antonio Kast, ha emergido como figura central en Primus Capital, una empresa de factoring bajo la dirección del empresario Raimundo Valenzuela. Recientemente impulsado a vicepresidente ejecutivo, tras una auditoría interna que descubrió operaciones sospechosas con cheques bancarios, que sumaban un total de $5600 millones, Guerrero enfrenta ahora el reto de regentar la compañía en medio de una crisis financiera. Con un 946% de la propiedad de Primus a través de la sociedad Orlando Mágico Ltda, su ascenso marca un punto de cambio en la narración de la firma.
Guerrero tomó medidas inmediatas tras su ascenso, suspendiendo al gerente general Francisco Coeymans y al director comercial Ignacio Amenábar. Esta acción refleja un cambio importante en la gestión de la empresa y un intento por restaurar la seguridad en Primus Capital. Además, ha iniciado comunicaciones con los primordiales acreedores de la empresa, primordialmente bancos, para asegurarles que se están tomando medidas para abordar la situación y restablecer la seguridad.
Fuera de Primus, Guerrero demostró ser un empresario polivalente. Lidera el family office Estrella del Sur, trabaja en la viña RR Wine y es directivo independiente en la sociedad cascada de SQM, Norte Grande. Su experiencia en el campo empresarial se complementa con su emprendimiento TimeJobs, una plataforma laboral que cofundó junto a Paola Luksic y Valenzuela, destinada a conectar a personas que procuran empleos temporales con empresas.
Aparte Haga clic aquí de gestionar la crisis interna, Guerrero debe combatir las demandas de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) y los tenedores de bonos, quienes buscan claridad y un plan de acción concreto. Paralelamente, corrobora las operaciones de Primus en Perú, donde la empresa experimentó una disminución del 5% en sus ganancias en 2022 en comparación con el año previo, añadiendo otra capa de dificultad a su rol.
El manejo de esta situación por la parte de Guerrero no solo es crucial para el futuro inmediato de Primus Capital, sino que asimismo es un punto de prueba para su liderazgo y capacidades gerenciales. Su capacidad para guiar a la compañía a través de esta tormenta financiera y restaurar su reputación en el mercado determinará su legado como un líder empresarial capaz y adaptable en tiempos de crisis.